¿Qué es el picor vulvo-vaginal?
El picor vulvo-vaginal es uno de los principales motivos de consulta de la mujer, tanto en la Atención Primaria, como en la Especializada y en Urgencias, donde puede suponer hasta un 20 % de las demandas ginecológicas.
Es un síntoma molesto, desconcertante para la mujer, y que genera gran cantidad de medidas de auto-terapia, incluidas algunas que pueden empeorar el episodio y en ocasiones hacerlo recurrente.
Desde el punto de vista clínico, aunque no suele estar vinculado a patología grave, su importancia deriva de su frecuente carácter crónico y/o recidivante.
¿Cuáles son las causas del picor vaginal?
Infecciones vaginales y disbacteriosis
Algunas de las causas más comunes del llamado picor vaginal, o picor genital ,son las alteraciones infecciosas, y entre ellas, las más frecuentes:
- vaginosis bacteriana ,y
- vulvovaginitis por hongos o candidiásica (candidiasis vaginal)
La primera no es una infección en sí; la vaginosis es una disbacteriosis, es decir, un desequilibrio entre los microorganismos de la vagina que conlleva un sobre-crecimiento fundamentalmente de anaerobios. No suele asociarse a inflamación, por lo cual puede ser asintomática y no es tan frecuentemente motivo de picor como la vulvovaginitis candidiásica (VVC).
La mayoría de las vulvovaginitis candidiásicas (VVC) se deben al hongo denominado Candida albicans. Aunque un 20-25% de la población femenina premenopáusica pueden ser portadoras asintomáticas de Candida, se calcula que alrededor del 75% de las mujeres desarrollan al menos un episodio de vulvovaginitis candidiásicas (VVC) en su vida.
El 75% de las mujeres desarrollan al menos un episodio de #vulvovaginitis candidiásicas en su vida
Síntomas de la vulvovaginitis o candidiasis vaginal
- Picor vulvar;
- Flujo vaginal blanquecino, denso y abundante;
- Molestias al orinar
- Molestias en las relaciones sexuales
La sintomatología está presidida por picor vulvar, que puede llegar a ser intenso, y que suele acompañarse de mayor o menor enrojecimiento de las mucosas genitales, e incluso de la piel de alrededor; y flujo abundante y denso, de color blanquecino y a veces con aspecto en grumos.
También puede asociar molestias al orinar, por el contacto de la orina sobre la mucosa irritada (disuria de contacto), y/o al mantener relaciones sexuales (dispareunia).
La mayoría de las #Vulvovaginitis candidiásicas se deben al hongo denominado Candida albicans
La vulvovaginitis candidiásicas (VVC) es una causa de picor vaginal recurrente y crónico en el 5-15% de las mujeres sanas (dos veces más común durante el tercer trimestre del embarazo), y en un mayor porcentaje en las diabéticas con mal control metabólico.
El picor cronificado producido por la vulvovaginitis candidiásicas (VVC) puede ser el primer signo que intuya el diagnóstico de diabetes.
Infecciones vaginales por toma de antibióticos
El verano es una época del año donde el número de consultas por vulvovaginitis candidiásicas (VVC) aumenta debido, entre otras cosas, a:
- cambio en la alimentación (aumento de hidratos de carbono: pan, pasta, dulces, alcohol, etc),
- ropas de baño húmedas durante largos periodos de tiempo, etc.
Pero uno de los factores que más directamente se relaciona con un episodio de candidiásis vaginal es la toma de antibióticos, sobre todo los de amplio espectro como la amoxicilina.
En mujeres diabéticas el control metabólico mejora el pronóstico y disminuye las posibilidades de cronificación de vulvovaginitis candidiásicas (VVC), pero en mujeres sanas el evitar las recurrencias se convierte en un reto, para el clínico y para la mujer.
Es de vital importancia un correcto diagnóstico que asegure el tratamiento adecuado, así como mantener el ph de la vagina, para que exista un buen equilibrio entre sus microorganismos.
Es una medida útil el reducir la ingesta de alimentos ricos en hidratos de carbono, pues el exceso de azúcar de la orina y de las secreciones vaginales pueden ser un sustrato para el sobre-crecimiento de los hongos.
Atrofia de las mucosas vaginales
Otra causa frecuente de picor genital es la atrofia de las mucosas. Puede ser debida a:
- enfermedades como el liquen escleroatrófico,
- procesos de radioterapia,
- atrofia postmenopáusica (la causa más frecuente)
La atrofia postmenopáusica es secundaria a la disminución de los niveles de hormonas, fundamentalmente de estrógenos, que conlleva la menopausia. Supone un adelgazamiento de los tejidos genitales, que aparecen pálidos y con escasos pliegues en la exploración. En estado avanzado el cambio de aspecto de los genitales es notable, así como la pérdida de elasticidad.
El picor en la atrofia puede ser uno de los primeros síntomas, asociado a la sequedad vaginal y a la falta de lubricación como respuesta al estímulo sexual. Estos síntomas pueden aparecer incluso en la perimenopausia, cuando la mujer conserva aún las reglas, pero sin lugar a dudas es uno de los síntomas más frecuentes de la postmenopausia inmediata.
Alergia e irritación
Otras causas de picor vulvo-vaginal menos frecuentes son las relacionadas con procesos alérgicos o irritativos, debido a los agentes químicos incluidos en:
- gel de baño,
- tampones,
- juguetes sexuales,
- preservativos,
- ropa interior…
Estos agentes son también potenciales alteradores del equilibrio del ecosistema vaginal, y por lo tanto pueden provocar Vaginosis, o incluso VVC recurrente.
Tratamiento de los picores vaginales
Identificar alérgenos
Se recomienda identificar el alérgeno o el agente irritante que se asocia al cuadro clínico para poder evitarlo, que no siempre es sencillo, e intentar recuperar el equilibrio de la flora vaginal. En este aspecto, los productos probióticos pueden ser de mucha utilidad.
Equilibrar la flora vaginal
En la actualidad se obtienen buenos resultados en el mantenimiento del equilibrio de la flora vaginal mediante el aporte de lactobacilos en productos probióticos.
Esta medida no sólo mejora las tasas de curación del tratamiento específico de los brotes agudos, sino que disminuye el riesgo de recidivas y cronificación de las infecciones vulvo-vaginales más frecuentes.
También se usan de forma preventiva, cuando se prescriben antibióticos de amplio espectro (como la amoxicilina) por cualquier motivo.
El uso de #probióticos mejora la tasa de curación de la #vulvovaginitis candidiásica